sábado, 15 de noviembre de 2014

Almas afines

Deja que me exprese, Alma, con todas mis fuerzas,
deja, por favor, concretar aquello que sienta.
No me encierres en claustros y no me pongas cadenas,
porque mi piel esta viva, roja la sangre en mis venas.

Aún la flama esta ardiendo, te pido, no la detengas,
y permite que se esparza por mi vientre que se quema.
Dale todo mi amor a aquel que mi pasión anhela,
dale los besos más suaves que alguna vez existieran.

Que cierren sus dulces ojos cuando el sueño lo venza
y que dejen en su frente marcas de flores de menta.
Porque mi voz se apasiona, tiembla agitando sus letras,
y en suspiros se dilata cuando sus labios me besan.

Que sean mis besos en él las caricias que liberan
todo el ardor contenido y que mi cuerpo desea.
Y nos fundamos los dos en íntima confidencia,
de aquellas que solo almas, muy afines, se dispensan.

martes, 7 de octubre de 2014

El melancólico


Remontado por las horas de el día
aterriza en la noche que despierta.
La ventana de su sueño está abierta
y se dispersa en soflamas de afonía

Diligente en estrechar melancolía
se dispone a recoger toda esa nota
que en su piel ociosa se alborota
y solo sabe expresarlo en agonía.

En sus sueños es andante caballero
que persigue aquello que aglomera
una pena, una tristeza, una quimera

y no puede suspender su derrotero.
Pero ya quizás mañana se disponga
a no extraer limón de un naranjero.

domingo, 5 de octubre de 2014

Me tomabas de la mano


Porque tengo el alma herida no te tomas de mi mano.
Porque no puedo seguirte en este lapso, tan humano,
por un tiempo algo breve, solamente por un rato,
ya no puedes esperarme, ya me vas poniendo horario.
¡Tu paciencia es tan corta! Y eso ¿sabes? duele tanto.
Como extraño, tantas veces,
el calor que abrigaba a mi mano entre tus manos.

Porque no me das salida, porque vas poniendo plazos,
porque das futuro incierto al amor que ambos forjamos.
Porque ya nada te importa y me has dejado a un lado:
me envuelve la impotencia y me cuesta el aceptarlo.

La distancia es infinita y el eterno tiempo, amargo.
¡Quiero romper los relojes y borrar los calendarios!
y acortar distancia y tiempo para que estés a mi lado.
Si pudiese perpetuarme un segundo en el pasado
elegiría el momento, aquel que por vez primera,
me tomaste entre tus manos.



domingo, 24 de agosto de 2014

La palabra ausencia


Qué grata, ¡que grata! es la palabra ausencia
cuando ensimismada me alejo de todo.
Y viene el silencio con tal contundencia,
porque es mi manera, porque es mi modo

de buscar alivio a las ansias mezquinas
que tiene lo etéreo, lo trivial y humano
de este mundo excéntrico, que no se imagina,
que el vivir produce un fatal desgano.

Pero eso se cura con calma y reposo
¡muéstrenme otra forma de sanar la vida!
Pero mientras tanto mi equilibrio nervioso,
que es un tanto frágil, busca su guarida.

Laudo


Esta bien… no me debes nada.
Ni promesas rotas, ni cartas ajadas,
ni futuro perdido, ni caricias robadas,
ni un amor que falso. No me debes nada.

Tu ardid alevoso ganó mi confianza,
engañó al cerebro, preparó la trampa.
Esclavo de codicia, que era tu lanza,
Amaste mi oro, te me aprovechabas.

¿Dices que te debo? Dime acreedor:
¿cobrarme pretendes? Admirada aplaudo.
Tomaste mi fuerza, te he dado mis años
y si algo te excede, razónalo un laudo.


miércoles, 20 de agosto de 2014

Borrador


Yo también me pregunto en silencio,
qué será si en un lapso de tiempo
entregada al mutismo y la ausencia,
sin siquiera beber las palabras
que aumenta al amor con vehemencia.
En total sustracción de noticias
que ahonda sangrando esta pena…
Que será si pasado un tiempo
cuando sola me encuentre, y serena...
mueran todas mis ansias por verte.
Y lo que creí que era amor no lo sea.

jueves, 24 de julio de 2014

No quieras poner,
alma tremebunda,
un velo de tristeza
a todo lo que abunda.

No quiera poner,
con maligno celo,
la desesperanza
a todo lo que anhelo.

No quieras romper
con insidia loca
y cruel egoísmo
todo lo que tocas.

Si lo que te brindo
te sabe a recelo,
vana es mi insistencia
de ir juntos al cielo.

Entonces renuncio
a darte mi amor
porque, por lo visto,
no le das valor.



¡Horrible!!! jajaja pero le tengo cariño. 

No se


Se agita la noche siguiendo tus pasos,
tú sobre la cama, yo… en el rincón.
Se inquieta la noche que cae a pedazos
porque presentimos un próximo adiós.

Silencios molestos, clausuras cobardes,
lágrimas que arden en el interior.
Palabras que mueren antes de decirlas
erigiendo un muro entre vos y yo.

Cuando al fin me quiebro, desemperezada,
hablo desde el sitio de mi desazón.
No existe el orgullo para el que ama,
no existe el olvido, ni existe el adiós.


lunes, 21 de julio de 2014

Mujer que no sabe amar


Me da un poco de pudor, como mujer, reconocer que estoy sola porque no supe estar acompañada.. Las personas que pasaron por mi vida fueron aves peregrinas a las que la vida no me dio tiempo para acabar de amarlas.
Es raro ver como los vasos se pueden vaciar en un instante, las lámparas dormirse y los recuerdos esfumarse.
Te empiezas a preguntar si algo tuvo realmente el valor que se le daba.
Todo tan efímero, tan poco alcanzable, tan anhelado.
El tiempo no perdona la ignorancia, ni disculpa la ineptitud. Y yo nunca fui una alumna prodigio…
Anclada al titubeo, no se como dar el primer paso. Como un infante de meses estoy petrificada en mi cuna de reparos angustiosos. Los errores puedo dejarlos sostenidos por tiempo indeterminado. Y no reacciono.


Y al final, se me va la vida. Sin completarme como mujer.

lunes, 7 de julio de 2014

¿A dónde va el amor cuando se muere?


¿A dónde va el amor cuando se muere?
¿Qué queda del despojo de tanto sueño habido?
¿Cómo  puede compensar a lo sufrido
si no es con el mismo amor que muerto hiere?

¿A dónde va el amor sin que se altere
la consistente convicción de los caídos,
que buscan en el aturdimiento permitido
una corta tregua que al amor supere?.

Y sin poder acallar dolor ni ausencia
grita el corazón ¡¿por qué te mueres?!
Y cae rendido bajo tierra.

Nunca hallará razón ni conveniencia,
seguirá preguntando ¿por qué mueres?
con la misma obstinación  en que se encierra.


jueves, 26 de junio de 2014

¿Para que tanto? ¿Y tanto esfuerzo?
Que si te quiero, y tú me quieres,
que si hay distancias y pasa el tiempo,
que si hay cansancio y noches largas,
que si mis sueños sueñan tus sueños.
Que si te explico y tú me explicas
no cambia nada de lo que siento.
Que con razones o sin razones
gobiernan solo los sentimientos.
Que si el camino que va a tu casa
está muy cerca o está muy lejos.
Que si hay fechas que no coinciden
hay calendarios que borraremos.
Que si hay espera no habrá relojes
ni mediremos nuestros proyectos.
Que importa nada si estando juntos
todo eso cabe dentro de un beso.

miércoles, 25 de junio de 2014

No quiero enamorarme


No quiero enamorarme, porque duele,
duele tanto que aturde a los sentidos,
Arrastra mar adentro mi mínimo navío,
confunde mi intelecto, me estremece.

No quiero enamorarme porque sangra
el corazón abierto a toda hora,
 entregado a su amante sin demora
y no puede discernir cuando acontece.

Estar enamorado me ha servido
para cortar a lonjas mi existencia,
armarme de esperanza y de paciencia,
buscar en su recuerdo mi dulce complacencia.


No quiero enamorarme porque seco
el caudal de mis lágrimas saladas,
que empapan las almohadas abrazadas
al recuerdo de su infinita ausencia.

No quiero enamorarme porque olvido
quien soy, cual es mi historia y derrotero.
No quiero enamorarme porque muero
y aún muerto resucito y mas le quiero.

Se me escapa el alma por la boca
cuando pongo en su nombre mis suspiros.
No se si estando enamorado sigo vivo
y sin nunca haber amado estaba muerto.

Perdona que esta  perpetua y trágica agonía
salpique al bello amor que alguna vez he sentido.
No eres tú, amor, amor, es el olvido
que intenta sofocar a tu existencia.

sábado, 17 de mayo de 2014

Dime si alucino



Dime si en el surco que dibujan a tus labios,
donde aflora la pasión de rojo fuego,
esos labios, sortilegio de mi ruego
(persistente pretensión en que deambulo)
se regalan en un si sin disimulo.
Dime tú si no alucino y te entrego
hasta la última gota de mi sangre,
hasta el último suspiro de mi vida,
hasta la última fuerza que sostiene
esta flama de pureza concebida
por ganarme tu amor, y no descanso,
hasta hallarte y seas mía, solo mía.