Mueren las palabras cuando ya no hay nada
de caricias suaves ni mirada clara,
cuando ya no pones de noche dormido
mi nombre en tu boca y no me acompañas
a caminar la vida que por estos rumbos
esta sumergida en un sueño profundo
y sin despertar por no darse cuenta
que a su lado hoy ya no te encuentras.
Te miro en silencio y sin molestarte
esperando el día de tu fatal huida,
para que se termine todo este calvario
y puedan cerrarse todas mis heridas.
Cuando tu te vayas, aunque sola y triste,
se habrá acabado mi gran agonía.
¡Ave, alza el vuelo y olvídate todo
de aquello que impida tu triste partida!
de caricias suaves ni mirada clara,
cuando ya no pones de noche dormido
mi nombre en tu boca y no me acompañas
a caminar la vida que por estos rumbos
esta sumergida en un sueño profundo
y sin despertar por no darse cuenta
que a su lado hoy ya no te encuentras.
Te miro en silencio y sin molestarte
esperando el día de tu fatal huida,
para que se termine todo este calvario
y puedan cerrarse todas mis heridas.
Cuando tu te vayas, aunque sola y triste,
se habrá acabado mi gran agonía.
¡Ave, alza el vuelo y olvídate todo
de aquello que impida tu triste partida!
No hay comentarios:
Publicar un comentario